El presidente peruano Martín Vizcarra, quien estaba completando el mandato del presidente Pedro Pablo Kuczynski (quien renunció 23 de marzo de 2018 acosado por denuncias de corrupción en su contra), fue destituido por el Congreso.
Vizcarra, que según las encuestas gozaba de un importante apoyo popular fue destituido este lunes “por incapacidad moral” por el Congreso peruano. Como hecho singular de un total de 130 legisladores, 68 de ellos tienen procesos judiciales en curso.
La destitución de Vizcarra ocurre a solo cinco meses de las elecciones generales programadas para el próximo abril. Muy poco tiempo atrás Vizcarra había soportado otro intento de destitución, pero había salido airoso. Ahora la base para su destitución fueron acusaciones de presunta corrupción cuando era gobernador de la provincia sureña de Moquegua (2011-2014).
Lo acontecido con Vizcarra no es sino un acontecimiento más de presidentes peruanos acusados de abusos de poder y corrupción. En la lista están Alberto Fujimori (1990-200), condenado por crímenes de lesa humanidad; Alejandro Toledo (2001-2006), espera su extradición desde EEUU acusado de recibir hasta 35 millones de dólares de Odebrecht; Alan García (1985-1990; 2006-2011) quién se suicidó cuando la policía iba a detenerlo por el escándalo de la constructora brasileña; Ollanta Humala (2011-2016) que enfrenta la posibilidad de 20 años de cárcel por lavado de activos; y Pedro Kuczynski (2016-2018), bajo arresto domiciliario, también por el caso Lava Jato.
Dice un análisis del portal INFOBAE que “si bien la popularidad de Vizcarra alcanzó niveles no vistos en décadas (especialmente tras cerrar el Congreso y también en el inicio de la pandemia, superando el 80%), la gravedad de la crisis sanitaria y económica ha mermado su aprobación. Si algo lo salvaba es que los congresistas se llevan el mayor rechazo (imagen negativa de 72%, según IPSOS), aun después de la votación que reconfiguró las fuerzas y castigó a los partidos más ensuciados con la corrupción. Pero la disolución no trajo mejoras sustanciales”. Vizcarra era un presidente sin partido político y sin apoyos sustanciales.
El desprestigio de la clase política e instituciones de la democracia republicana es muy grande en Perú y no parece que pueda resolverse ni rápida ni fácilmente.
Martín Tanaka, doctor en Ciencia Política y docente de la Universidad Católica del Perú señalo que, frente a las nuevas elecciones, reina la incertidumbre, con un número alto de indecisos en las encuestas. “Hasta 2016, uno creía identificar cierto elenco estable de candidatos, uno sabía que los excandidatos se iban a presentar y que el fujimorismo iba a tener un candidato de fuerza. Con el suicidio de Alan García, la crisis del fujimorismo, y los problemas judiciales de los líderes, se ha quitado del escenario a los actores que uno acostumbra a ver y ha dejado un espacio vacío”, dijo el analista.
Por su parte el sociólogo y analista político Agustín Haya de la Torre agrego que ““Los escándalos han profundizado el desasosiego. Hace 30 años esperamos que los partidos se recompongan, pero ahora ya tengo mis dudas. Es muy difícil pronosticar el 2021, la elección es un agujero negro, vaya uno a saber qué pasará”.
En el segundo trimestre de este año la economía peruana cayó un 30,2 %, cifra que representa una de las mayores caídas del Producto Interno Bruto desde que se tienen registros históricos. Esta cifra ubica a Perú entre los países más afectados en términos económicos de todo el mundo.
Sin embargo, algunos cambios en el nivel de exportaciones, inversiones públicas y privadas, mejoras en el sistema bancario hicieron que los indicadores de expectativas empresariales mejoraron en agosto de este año, con lo cual sumaron cuatros meses de mejora continua, de acuerdo con el Banco Central de Reserva (BCR).
Ese resultado se explicó fundamentalmente por la gradual reanudación de las actividades económicas en el país, dice un informe del CESLA, un centro de estudios económicos peruano,
El indicador de expectativas del sector empresarial sobre una mejora de la economía avanzó de 39 a 43 puntos de julio a agosto, en tanto que a 12 meses aumentó de 56 a 60 puntos.
Perú es el país de la región con el mayor nivel de reservas en relación con su PBI. La cifra a junio era más de U$S61 mil millones equivalente al 30.4% del PBI nacional. Otros países importantes como Colombia son de 12.3%, Chile 15.0% y México 15.2%. La inversión de los activos peruanos se encuentra en un 81% en dólares estadounidenses, 8% en yenes, 3% en dólares australianos, 2% en yuanes, 1% en libras esterlinas y 1% en coronas noruegas. Los activos líquidos son U$S60,400 millones. Mientras que su deuda externa salto de ser un 22% a un 35% del PBI.