Graduado en Derecho, desde muy joven ha estado involucrado en la vida política. Fundador
del Partido Socialcristiano. Su padre fue presidente de la república y promovió medidas como las
Garantías Sociales, la fundación de la Caja Costarricense de Seguro Social y el Código de Trabajo.
Fue acusado de fraude electoral, autoritarismo y persecución de minorías étnicas.
Rafael fue ministro de Asuntos Exteriores y miembro del Consejo de la Seguridad Social Durante la
presidencia de Rodrigo Carazo Odio (1978-1982). Se presentó como candidato presidencial dos
elecciones y en ambas fue derrotado. Consiguió la presidencia de la República en 1990, siendo el
gobernante más joven de Costa Rica. En su mandato realizó numerosas privatizaciones e inició una
reforma del Estado para impulsar una política económica liberal y efectuar reformas fiscales y
financieras que dieron mayor estabilidad económica al país. Aumentó el costo de los servicios
públicos, combustibles e impuestos, redujo el número de funcionarios, luchó asimismo contra los
privilegios fiscales creados por gobiernos anteriores y limitó el crédito bancario.
Intentó ser candidato presidencial del Partido Unidad Social Cristiana en las elecciones de febrero
del 2010, aunque debió renunciar a su candidatura el 5 de octubre del 2009, tras ser condenado a
cinco años de prisión por dos delitos de hurto de caudales del erario y enriquecimiento ilícito en el
Caso Caja Fischel.